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A veces, estar solo suele ser muy productivo. Foto: BAER |
1. Así no juego. Si el ser social implica soportar a vecinos molestos o suponer que es divertido molestar a los demás, tendrán que perdonarme, prefiero ser un anacoreta; es posible que ya haya expuesto esta inquietud, sin embargo, adquiere relevancia en estos días debido al alza en los mensajes que priorizan la violencia en los medios de difusión masiva que parecen incidir en el comportamiento pasivo agresivo de varios pobladores de esta bendita nación, aunque algunos sí son francamente un riesgo para los demás. varias pláticas tanto con la licenciada Rodríguez como con el contador Olvera, me han llevado a reflexionar sobre cómo podría acabarse con este ambiente de incertidumbre que venimos padeciendo desde... siempre y la respuesta que me doy es sumamente radical.
2. La cueva. Si me lo permiten, trataré de hacer un símil entre nuestra sociedad actual y mi humilde morada que, funcional y todo lo que quieran, pero está mal hecha de origen; para empezar, el argumento de aprovechar al máximo el espacio entra en conflicto con la distribución del lugar, puesto que hay dos áreas que se pierden por haber puesto el lavadero y patio de servicio a un lado de la sala y el abrir un hueco para la escalera de acceso, roba casi la mitad del comedor. Se imaginarán que cuando quiero sacar la ropa lavada a los tendederos, debo atravesar la sala y el estudio para llegar a ellos, por otro lado, lo que debería exponerse al exterior como cocina, comedor y sala, están al revés, el frente resultaron ser el baño con las recámaras, algo así como lo que pasa con el país.
3. Miedo a la soledad. Ni como estado de ánimo ni como estilo de vida, ser un solitario es eventual de acuerdo con las necesidades compartidas que tengamos y aceptemos, pues las básicas resultan difíciles de ponerlas en común; aclararé para que no vayan a respingar. Una necesidad básica es alimentarnos y no podemos compartirla porque nadie puede masticar ni deglutir en nuestra representación, por otro lado, comer como concepto es una acción social que implica una relación regida por ciertos modales en la mesa, incluso al hablar en español decimos «voy a comer con...» y no «voy a alimentarme con...», sonaría muy raro rayando en el canibalismo. Que bueno, hay quienes se alimentan exclusivamente con plantas, lo cual es diferente de alimentarse de plantas, la primera es eventual (como en cuaresma) y la segunda, permanente (como los veganos).
4. Baños de pueblo. Dicen que la cima es un lugar muy solitario, pero eso es cierto porque hemos creído que las puntas deben ser por siempre muy agudas, por ende, quien la ocupe deberá ser sólo uno; lo que no pensamos es que no todo es el Fujiyama, también hay elevaciones como las sierras Madre, la cordillera de los Andes o los Apeninos, por lo que hay cimas para todos, nada más que debemos entender que no hay un único modo de éxito; subir las cimas también es una manera de caminar con el pueblo, quizá la mejor de ellas dado que sería la creación de riqueza por igual, sin querer implicar que se trata sólo de dinero, también hay conocimiento, cultura, tradiciones y costumbres que su preservación representa una oportunidad para crecer como los seres humanos que pretendemos. Salud.
Beto
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